martes, 21 de noviembre de 2017

INCERTIDUMBRE

Durante estos 21 años he tenido brotes de todo tipo: más y menos intensos, unos que han remitido rápido, otros que han sido muy lentos, que sólo han afectado una zona del cuerpo otros que se han apoderado de varias y todos por suerte han ido remitiendo y dejando secuelas mínimas, pero si tengo que destacar algo de todos ellos y que me desespera es la llamada INCERTIDUMBRE.

Forma parte de mi vida el que día si y día no me note sensaciones y cosas raras, pérdidas de sensibilidad, adormecimiento, hormigueos, pérdidas de equilibrio... la continua fatiga y cansancio que mientras se van y vienen y no persisten pues te acostumbras y no les das tanta importancia pero... la cuestión es que cuando estas sensaciones llegan y deciden quedarse, cuando pasan horas y ahí siguen, y llega el día siguiente y parece que la sensación es un poco más intensa, entonces es el momento en el que pienso: "¿Me echabas de menos?"

Intento no obsesionarme y darme un poco más de tiempo antes de dar la voz de alarma, no vaya a ser que encima parezca una paranoica y también me repito y repito ese diálogo interno en el que continuamente me digo a mi misma que será una falsa alarma y que al día siguiente todo habrá vuelto a su ser.

Desafortunadamente en la gran mayoría de los casos no es así. Al día siguiente aunque trato de convencerme que no será un brote las sensaciones empiezan a ser más extensas e intensas y sientes como vas perdiendo el control de tu cuerpo, que aunque puedas seguir andando pero ya no controlas y sientes igual tus piernas, que aunque puedas seguir viendo las imágenes y tu vista pierden intensidad, que aunque puedas coger y manejar las cosas no van a la velocidad y ritmo que a ti te gustarían... y en mi caso es cuando tengo que enfrentarme y vivir unos de los momentos más duros de vivir con EM, es cuando me doy cuenta de que es real, que forma parte de mi, que ha vuelto a visitarme y que no sabes hasta cuando va a quedarse.

Una vez que das la voz de alarma y efectivamente es un brote llega la etapa de aceptación y aunque me cuesta muchísimo me hago consciente de que tengo que permanecer entera y entonces es cuando trato de sacar las fuerzas y energía para concentrarme e intentar verlo todo de la mejor manera posible con la esperanza e ilusión de que todo remitirá y volveré a estar bien.

Desde el último brote que me dio en febrero a este que tengo en estos momentos no me llegué a recuperar del todo y mis piernas no han vuelto a ser las de antes, más incertidumbre, es inevitable... se quedarán así, irán a mejor, a peor...nadie lo sabe, pase lo que pase de lo que si estoy segura es que sólo depende de mi la actitud a elegir para sobrellevarlo y hoy por hoy me sigo decantando por mi actitud positiva: QUE NADA NI NADIE NOS DETENGA!!

Consideramos la incertidumbre como el peor de todos los males hasta que la realidad nos demuestra lo contrario (Jean Baptiste Alphonse Karr)




¡ESTOY DE VUELTA!

 Hace más de cuatro años que no publico en el blog. No ha sido por ningún motivo en concreto y lo más importante es que no ha sido porque ha...