domingo, 28 de octubre de 2018

SIN FUMAR, MEJOR SERA





            El próximo mes de marzo hará 10 años que tome una de las mejores decisiones de mi vida: DEJAR DE FUMAR. A fecha de hoy todavía me parece increíble que fuera capaz de lograrlo.

Empecé a fumar desde muy joven, demasiado joven, tanto que me da vergüenza ponerlo. Por tonteo, por curiosidad, porque parecías más importante y mayor si lo hacías…, en fin por lo que fuera. Con el paso del tiempo me fui picando y cada vez fumaba más, hasta llegar a media cajetilla diaria y los fines de semana casi entera.

Tengo que reconocer por increíble que parezca que hasta llegó a gustarme o mejor dicho eso era lo que yo llegué a pensar, que lo hacía porque me gustaba. Deseaba terminar de comer para encenderme un cigarro, me encantaba el café porque al mismo tiempo fumaba y no digamos de las cañas, eso para mí era un ritual. Por eso, pasados unos años, si se me pasaba por la cabeza la idea de quitarme de fumar rápidamente desaparecía porque me visualizaba como una infeliz, no era capaz de verme haciendo esas cosas y no fumar. Qué ingenua, verdad?, pues sí, así pensaba y al hablarlo con muchas personas fumadoras la mayoría pensaba como yo.

En total habré fumado aproximadamente unos 14 años, tuve unas tres intentonas que fracasaron porque en realidad no quería dejarlo, hasta que por fin después de meditarlo y pensar detenidamente lo que me perjudicaba, una noche de golpe, así sin más, me estaba fumando un cigarro y le dije a mi marido mientras lo apagaba: “¡dejo de fumar y esta vez es de verdad!” y lo fue, tan verdad que hasta el día de hoy no fumo, lo cual me alegra muchísimo, porque saboreo mejor las comidas, respiro muy bien, las cañitas me saben a gloria…

Todos sabemos que fumar perjudica seriamente la salud a cualquier persona, razón de sobra para dejarlo y razón principal por la que yo lo hice, sobre todo por los consejos de mi dentista ya que fumar me perjudicaba muchísimo mi salud bucal. Sin embargo, en ningún momento tome la decisión pensando en la esclerosis múltiple, no era consciente, entre otras cosas porque no estaba demostrado ni tenía información de que el tabaco influyera en el inicio y evolución de la enfermedad. 

Actualmente sí hay estudios que lo demuestran, que el tabaco si influye en la EM. Sin saberlo lo hice, y aunque he tenido brotes en estos años y ahora que llevo año y medio con una batalla más intensa con la EM, me alegra el pensar que por no fumar me estoy haciendo un favor a mí misma y que es una razón menos que tiene esta caprichosa para vencerme. 

                Por eso desde aquí, quiero animar a mis compis de batalla fumadores a que lo dejen, que si se quiere se puede y que soy testigo de que se está y se siente mejor sin fumar. 

         “NUNCA ES TARDE PARA EMPEZAR ALGO BUENO”.





FIRME, A FLOTE Y LUCHADORA

     Es la imagen que casi siempre tienen de mí: "FIRME, A FLOTE Y LUCHADORA", pero tengo que deciros que la realidad es otra. Con...